ÉXITO EN PACIENTES CON CÁNCER GRACIAS A LA EDICIÓN GENÉTICA

Las células inmunes editadas genéticamente pueden durar, mejorar y funcionar meses después de que un paciente con cáncer las reciba. El primer estudio realizado en pacientes con cáncer mediante la técnica de edición de genes CRISPR, ha demostrado que es segura. El equipo mostró que las células obtenidas de los pacientes, llevadas otra vez al laboratorio, pudieron matar el cáncer meses después de su fabricación. Después de analizarlas, se confirmó que estas celulas fueron editadas con éxito.
En el ensayo clínico, se probaron a tres pacientes que presentaban un cáncer sanguíneo y un sarcoma con metástasis, un tumor en los vasos sanguíneos. Este fue el primer ensayo clínico de Estados Unidos, y se trata de una fase 1. Los resultados sugieren que la edición de genes es un método seguro y puede que haya funcionado, pero aún está por determinar con seguridad y se deberán realizar más pruebas.

La finalidad de este estudio está relacionado con la terapia de células T CAR, en la que las células inmunes del paciente están fabricadas para combatir el cáncer. El equipo empezó extrayendo células inmunes T del paciente. Pero en lugar de añadirles un receptor, utilizaron por primera vez CRISPR para realizar cambios en tres genes, y poder aumentar la capacidad de reconocer tumores y combartirlos.

El nombre dado a estas nuevas células es NYCE, como amable en inglés, en honor a su función.
Definitivamente estamos ante un estudio que ha mejorado la inmunoterapia gracias a esta nueva edición genética.
En total se hicieron 4 ediciones. Las dos primeras, eliminaron los receptores naturales de estas células ( T ) con el fin de que estas destruyan el tumor. En la tercera se eliminó un punto natural que impedía actuar a las células. Y por último en la cuarta edición, se introdujo el receptor de estas células sintéticas específicas del cáncer que dirigen a las células T modificadas a unos antígenos.

Estas células editadas sobreviven en el flujo sanguíneo durante 9 meses, más que las células inmunes sin editar. Tras varios meses, los investigadores volvieron a extraer células de la sangre de los pacientes y aislaron a las células editadas con CRISPR para su estudio, y al llevarlas al laboratorio se dieron cuenta que estas células aún podían matar a los tumores.

Fuentes: El País , ABC , Wikipedia

Comentarios