En 2011 se detectaron las primeras señales de actividad volcánica en la isla de El Hierro. Del 10 de octubre al 5 de marzo de 2012 tuvo lugar una erupción submarina en el Mar de las Calmas. Pero la actividad volcánica no cesó en esta isla. En los dos años siguientes hubo al menos seis nuevas reactivaciones de esta actividad, junto con actividad sísmica y deformaciones del terreno en toda la superficie de la isla.Un equipo del Instituto Geográfico Nacional, colaborando con la Universidad Politécnica de Madrid, analizó y relacionó la sismicidad y la deformidad durante todas las reactivaciones.
También han descubierto que los logaritmos del volumen de magma intruido y de la energía sísmica liberada en las reactivaciones siguen una relación lineal.
El estudio propone un nuevo pronóstico, que podría obtener una estimación de la energía sísmica que se liberaría, a partir de datos de deformación del terreno.
Dado que las siete reactivaciones volcánicas estudiadas hasta ahora siguen la relación lineal observada, se espera una hipotética nueva reactivación volcánica en el Hierro, adaptada también a esta relación. Si además se observase un desfase temporal suficiente entre deformación y sismicidad, podría estimarse el orden de magnitud de la energía sísmica que se liberaría en la reactivación.Esta investigación aporta una nueva herramienta para la gestión de la emergencia volcánica en El Hierro que sería de utilidad para las autoridades de Protección Civil.
Fuente: Noticias de la ciencia
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