LAGO MAGMÁTICO BAJO EL VOLCÁN UTURUNCU

El lago, a casi 1.000°C de temperatura y tan grande como un lago norteamericano, podría ayudar a comprender la causa de las erupciones volcánicas.

El Altiplano de Bolivia ha sido un extenso lugar de actividad volcánica durante los últimos diez millones de años, aunque actualmente ahí no hay volcanes activos, dice Jon Blundy, petrólogo de la Universidad de Bristol. 

El volcán Uturuncu permanece en estado de letargo, aunque emitiendo fumarolas, tiene más de 6.000 metros de altura y se encuentra en el departamento de Potosí, en el sur de Bolivia. 

Un volcán es un misterio y no hay ningún método totalmente seguro para predecir una erupción, investigadores de diferentes países han analizado la conductividad eléctrica (el grado de circulación de la corriente eléctrica a través de un material) subyacente en el Altiplano andino, y bajo el cerro Uturuncu han detectado una "anomalía", la misma palabra que utilizan los investigadores que buscan espacios vacíos dentro de las pirámides.

El Altiplano está asentado sobre un gran anomalía geofísica a una profundidad de 15 kilómetros por debajo de la superficie terrestre, los científicos afirman haber descubierto un enorme lago magmático de 1,5 millones de kilómetros cúbicos, comparable al volumen del mayor lago de América del Norte, el Lago Superior, cuyo lecho rocoso está a unos 970°C de temperatura, bajo el volcán Uturuncu, según ha informado  la Universidad de Bristol.

Los científicos han medido la conductividad eléctrica de la roca parcialmente fundida y han concluido que debe haber entre un 8 y un 10% de agua en el silicato fundido. El silicato fundido sólo puede disolver el agua a una alta presión; a una baja presión el agua sale de la solución y se forman burbujas. Y esas burbujas pueden desencadenar erupciones volcánicas. El 8-10% de agua disuelta en la región que presenta una anomalía masiva es equivalente al agua que se encuentra en algunos de los lagos de agua dulce de Norteamérica. Los investigadores esperan comprender mejor la relación entre el agua y las erupciones volcánicas para poderar perfeccionar los sistemas de predicción, también podría ser una evidencia de que el agua en la Tierra no provino de cometas o asteroides, sino que ya estaba presente es su interior cuando se formó el planeta.

Comentarios