Los seres vivos más simples que conocemos, las bacterias actuales, son ya organismos muy complejos, dotados de maquinarias multiproteicas bastante sofisticadas.La hipótesis dominante es que toda esa complejidad es el producto de 3.500 millones de años de evolución, y que por tanto las bacterias primitivas debían ser más simples. Pero una investigación rompedora revela ahora que no es así: las bacterias de la Tierra primitiva poseían unas maquinarias tan complejas como las actuales.
La Tierra tiene 4.500 millones de años, pero seguramente fue un infierno incompatible con la vida durante los primeros 500 millones. Los indicios de bacterias fósiles de hace 3.900 millones han sido muy discutidos por los geólogos, de modo que las evidencias fósiles más antiguas aceptadas generalmente datan de 3.500 millones de años atrás. Esos fósiles, naturalmente, no ofrecen ninguna información sobre las proteínas que contuvieron en vida.
Para examinarlos, los científicos han usado una ingeniosa máquina de tiempo conceptual. Las comparaciones entre los genomas de 50 especies de bacterias actuales generan un árbol genealógico. Las bacterias con genomas muy similares se separaron hace pocos millones de años, y ahora son dos "ramitas" vecinas terminales del árbol; si se parecen menos, se separaron hace más millones de años, y ahora estás en dos ramas diferentes; las bacterias actuales más dispares solo están conectadas por el tronco y, de hecho, definen cómo era el tronco hace 3.500 millones de años: qué genes y proteínas tenía, y cuál era su secuencia exacta.
Lo que generan son secuencias que se pueden escribir en un papel. Pero la tecnología actual permite resucitar una proteína a partir de esos textos, habiendo elavorado un complejo de proteínas llamado triptófano sintasa (porque sintetiza el triptófano, uno de los aminoácidos esenciales de la vida), y han demostrado en el laboratorio que funciona de una forma tan eficaz y sofisticada como su versión actual.
La teoría aceptada actualmente es que las enzimas más antiguas eran más simples que las actuales como defendería la teoría de la evolución. Pero ahora podemos decir que desde hace 4.000 millones de años las enzimas evolucionaron rápidamente en los primeros 500 años y que desde entonces no han sufrido casi modificaciones.
Fuente: El País.
La Tierra tiene 4.500 millones de años, pero seguramente fue un infierno incompatible con la vida durante los primeros 500 millones. Los indicios de bacterias fósiles de hace 3.900 millones han sido muy discutidos por los geólogos, de modo que las evidencias fósiles más antiguas aceptadas generalmente datan de 3.500 millones de años atrás. Esos fósiles, naturalmente, no ofrecen ninguna información sobre las proteínas que contuvieron en vida.
Para examinarlos, los científicos han usado una ingeniosa máquina de tiempo conceptual. Las comparaciones entre los genomas de 50 especies de bacterias actuales generan un árbol genealógico. Las bacterias con genomas muy similares se separaron hace pocos millones de años, y ahora son dos "ramitas" vecinas terminales del árbol; si se parecen menos, se separaron hace más millones de años, y ahora estás en dos ramas diferentes; las bacterias actuales más dispares solo están conectadas por el tronco y, de hecho, definen cómo era el tronco hace 3.500 millones de años: qué genes y proteínas tenía, y cuál era su secuencia exacta.
Lo que generan son secuencias que se pueden escribir en un papel. Pero la tecnología actual permite resucitar una proteína a partir de esos textos, habiendo elavorado un complejo de proteínas llamado triptófano sintasa (porque sintetiza el triptófano, uno de los aminoácidos esenciales de la vida), y han demostrado en el laboratorio que funciona de una forma tan eficaz y sofisticada como su versión actual.
La teoría aceptada actualmente es que las enzimas más antiguas eran más simples que las actuales como defendería la teoría de la evolución. Pero ahora podemos decir que desde hace 4.000 millones de años las enzimas evolucionaron rápidamente en los primeros 500 años y que desde entonces no han sufrido casi modificaciones.
Fuente: El País.
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