La estatura de una persona está principalmente determinada por factores genéticos; una investigación muestra que es básicamente un rasgo hereditario. Mientras a algunos padres les preocupa que la baja estatura de su niño se deba a un problema de salud subyacente, los médicos pueden ahora utilizar el ADN como una forma bastante exacta para predecir la estatura. Aunque la salud, la nutrición y el hecho de si la mujer fuma durante el embarazo también pueden influir en el ritmo de crecimiento del niño, hay muchos genes diferentes que determinan la estatura. Una mezcla de códigos genéticos para el desarrollo de los huesos, aumento de hormonas y encimas metabólicas toma parte en el crecimiento y desarrollo normales.
La
estatura de los padres del niño en centímetros puede usarse para
predecir su estatura cuando sea adulto. En la mayoría de las poblaciones
del mundo, los varones adultos promedio tienden a ser más altos que las mujeres adultas. En los niños varones, la estatura de la madre se suma a la del padre, más 12 centímetros, y el total se divide entre
dos. Para las niñas, se suma la estatura de la madre a la del padre, se
restan doce centímetros del total y se divide entre dos. Esta debería
resultar una predicción bastante aceptable de la altura que el niño
alcanzará en su edad adulta, con una diferencia de tres a cinco
centímetros más o menos. Esto sostiene la idea de que es probable que
los miembros de una familia tengan estatura similar.
Patrones de retraso de crecimiento
Los
padres también deben tener en cuenta que algunos niños crecen más
lentamente que otros. Si esto sucede, es probable que uno de los padres
haya tenido también un crecimiento lento. Muchos niños que parecen ser
pequeños para su edad, en realidad están creciendo normalmente. El
problema puede ser el retraso en la edad ósea, lo que significa que la
edad de sus huesos es menor que su edad cronológica. Esta condición,
conocida como retraso constitucional del crecimiento, suele ser el caso
cuando no se presentan otros síntomas de enfermedad. Mientras estos
niños alcanzan la pubertad a una edad mayor que sus pares, sus cuerpos
alcanzan una talla normal cuando llegan a la edad adulta. Simplemente,
crecen a un un ritmo más lento. En la mayoría de los casos, sus padres
también tuvieron desarrollo tardío.
Otros factores que afectan el crecimiento
Una
deficiencia en las hormonas del crecimiento también puede causar un
retraso en el crecimiento del niño. En este caso, la glándula
pituitaria, ubicada en la base del cerebro, no produce hormonas
suficientes para un crecimiento normal. La glándula tiroides, otro
órgano del sistema endocrino, puede no segregar suficiente hormona
tiroidea, que es necesaria para que los huesos se desarrollen
normalmente. Esta condición, conocida como hipotiroidismo o baja
actividad de la tiroides, puede causar serios problemas en el
crecimiento del niño si no es tratada. Las anomalías genéticas domo el
síndrome de Down, un desorden de cromosomas, pueden también atrofiar el
crecimiento del niño. El síndrome de Turner es un desorden genético
corriente que afecta el crecimiento y desarrollo normales. Sólo ocurre
en niñas y se caracteriza por la falta de un cromosoma X, lo que produce
en la niña un crecimiento más lento y el retraso de la pubertad, con el
rasgo característico de tener baja estatura.
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