En el artículo publicado en la revista Nature Geoscience, el extenso equipo de investigadores Europeos y Americanos, nos describen el análisis de las 20 rocas que fueron sondeadas por el rover, y por qué sus hallazgos sugieren una historia diferente para el planeta de lo que se había pensado.
Los investigadores que estudian estos datos creen haber encontrado algunas evidencias que sugieren que en lugar de una falta de actividad planetaria magmática, las muestras de las rocas están llenas de sílice y tienen una composición muy rica.
La muestra de rocas con un color claro característico, son de un área dentro del cráter Gale que se encuentra en el hemisferio Sur al lado del monte de Sharp se han datado con una antigüedad de de 3.600 millones de años aproximadamente. Los investigadores describen las rocas con el aspecto de muestras de composición de minerales extraídos de la Tierra.
Esta similitud sugiere que el planeta rojo pudo tener una vez una tectónica de placas con una gran similitud a la de la Tierra. Hasta ahora, la suposición ha sido que Marte no tenía actividad magmática, algo que sería necesario para que se pudiesen desarrollar las placas.
Esto habría dejado que la superficie se cubriera de basalto, una situación muy similar a la de los fondos marinos del la Tierra. Los investigadores señalan que en algunas rocas los ingredientes son bastantes similares al algunos de los materiales continentales más antiguos de la Tierra.
Estos resultados no confirman la actividad magmática en el planeta o la existencia de placas tectónicas, simplemente sólo sugieren que podría haber sido una posibilidad.
Estas rocas encontradas podrían haber llegado a ser como son por la fusión parcial de basaltos que se hundieron de nuevo en la corteza. Pero, aun así, se necesitará más investigación para comprender realmente la historia de las rocas.
Fuente: Europapress
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